LAS NINFAS DE SIEMPRE EN LEON

Como me han preguntado sobre la manera de montar mis ninfillas con un mandril. Digo “mis” pero en realidad es el modelo que se ha utilizado en León toda la vida. En este caso montaré una color carne.

Materiales para utilizar

1.- Los materiales que necesitamos en esta ocasión  son hilo Gütermann, referencia 753, del color número 797. Para la brinca un hilo en fibra de poliéster color amarillo limón. Anzuelo Tiemco TMC 2487 del nº 14, un mandril y pluma de los gallos de León.

Inicio del montaje del abdomen

2.- Una vez sujeto  el anzuelo al mandril,   se cubre la tija del anzuelo con una cama de hilo Gütermann 797 (utilizaremos  uno de los tres cabos que previamente habremos separado) Procuraremos dejar unos dos milímetros libre a continuación de la anilla. Espacio donde posteriormente formaremos el tórax. Aprovecharemos la segunda vuelta sobre la tija  para sujetar los cercos (cuatro o cinco fibras de  pluma de gallo) y el hilo de poliéster amarillo limón con el que brincaremos el abdomen.

 

Colocación de los cercos

Sujeción del hilo de brincar

3.- Construido el cuerpo de la ninfa tomaremos  diversas fibras  de la pluma, en este caso en indio ( yo utilizo tres pellizcos) para imitar la alas incipientes que con el hilo de la brinca sujeto en lo que será la parte posterior del saco alar.

Brincamos para diferenciar segmentos

Sujeción de las fibras en la base del tórax

 

4.- Una vez que las hemos sujetado, con la uña, repartimos uniformemente. Suelen utilizarse estas misma fibras doblándolas hacia atrás para rematar el saco alar. A mí me gusta más cortar el sobrante y tomar un cabo de rayón el Molino verde oscuro ( núm. 8500) y fijarlo con la brinca al tórax  para este cometido.

Fijación del rayón para cerrar el saco alar

5.- Con el hilo sobrante amarillo limón formamos el tórax. Se trata de hacer una pequeña bola que posteriormente cubriremos con el rayón verde oscuro, tratando de imitar el saco alar de nuestra ninfa. (P.S. En algunas ninfas utilizaba el mismo hilo del cuerpo para hacer  la pequeña bola que dará lugar al saco alar. Ultimamente se lo hago a todas, creo que entran mejor)

Remate en la formación de saco alar

6.- Cortamos los sobrantes. Le damos una capa de barniz a la zona de anudado y lista para disfrutar de una jornada inolvidable de pesca. Ah, y repito que no  soy culpable si tenéis un mal día de pesca con esta ninfa; echarle la culpa a la luna, la niebla de la mañana, el agua que venía muy fría, el río crecido, el día caluroso o frío, etc, etc. Pero nunca os echéis la culpa sobre vuestras espaldas.

Aseguramos los nudos con barniz

Ninfa terminada

P.S.- Algunas fotografías dejan mucho que desear  así que procuraré, cuando tenga tiempo, sacar otras más nítidas. También la monto en anzuelo del 12 y en anzuelo recto con bola de tungsteno. En pesca, a veces, el tamaño sí importa.