miércoles, 27 de junio de 2012

El coche en el río


   Para que una jornada de pesca sea redonda debemos cuidar los pequeños detalles que, a veces, mejoran un mal día o por lo menos no lo empeoran. Uno de ellos es el estacionamiento del vehículo. 

Uno de mis sitios preferidos en el Esla

   Cuando llegamos al río nos pueden las ganas de pescar y no prevemos pequeños detalles que al retornar al vehículo, cansados de recorrer el cauce,  echaremos de menos, como una buena sombra o  una pradera, en este último caso las consecuencias son notorias, un vadeador lleno de tierra y un cabreo monumental porque habrá suciedad para todo nuestro equipo. 
Una percha natural

   No obstante  la Junta de Castilla y León sabedora de nuestra condición humana y lo obsesionados  que estamos  en esta Comunidad  por la limpieza,  nos recuerda  que tener el coche cerca del río, no implica que le podamos echar unos cubos de agua y así recoge la Ley 6/1992, de 18 diciembre 1992. Regulación y protección de los ecosistemas acuáticos y de Regulación de la Pesca en Castilla y León, en el

 Artículo 59°. Infracciones leves
Tendrán la consideración de infracciones leves:
12. Lavar ropas u objetos de uso doméstico en masas de agua declaradas trucheras.

Artículo 60°. Infracciones menos graves
Tendrán la consideración de infracciones menos graves:
22. Lavar vehículos o artefactos dentro de las masas de agua o en las riberas de los ríos  lechos de los lagos, lagunas o embalses



sábado, 23 de junio de 2012

El río de los recuerdos

Las truchas de la vida
 Pero no se olvide de que el recuerdo es como la sal: en la cantidad adecuada le da sabor a la comida; pero si se exagera, estropea el alimento. Quien vive demasiado en el pasado, gasta su presente en recordar”. 


   Traigo estas palabras de Paulo Coelho, de su obra “Cuidado con los recuerdos,”  porque observo como en determinadas páginas en las que se habla de la pesca de la trucha, se mira demasiado hacia atrás y algunas personas han caído en el desanimo manifestando que: o no han salido durante toda la temporada al río, o sólo un par de veces. Hay en sus palabras congoja y cuando cogen la caña la melancolía se apodera de su estado de ánimo pues nada es como antes, su padre y su madre ya no viven, quizás han perdido algún hijo al que enseñaron a pescar, ¡ que dura es la vida!, y que buenos ratos pasó, en otro tiempo, en el  río. En el quehacer cotidiano, me estoy refiriendo a nuestro circulo intimo y familiar, las alegrías eran sustituidas por las penas y viceversa, pero llegábamos al río y el río siempre se comió nuestras preocupaciones y ahora sólo me trae recuerdos que me ahogan y me afligen y caigo en el derrotismo. Bueno, quizás soy un poco exagerado, pero es lo que a mí me muestran determinados relatos en algunos foros.



   La jornada de pesca debe volver a ser un día de integración en la naturaleza y nada mejor que abandonar el río donde siempre hemos estado pescando, recorriendo cualquier tramo de otro de los muchos ríos que tenemos en la provincia, donde consigamos que la naturaleza nos sorprenda de  nuevo, sin mirar al pasado, y así, crearemos un nuevo presente. Quizás en este presente debamos aprender técnicas nuevas de pesca, porque nuestro cuerpo no está para tantos trotes, pero espero  que la brisa fresca del río nos haga querer la nueva vida que nos ha tocado vivir, porque siendo felices o intentándolo, quizás hagamos a otros, que se preocupan por nosotros, también felices. Bueno sólo es una reflexión sobre el desánimo que parece se apodera de nuestra sociedad y que, como no podía ser de otra forma,  al río también ha llegado.



jueves, 21 de junio de 2012

Coto de Quintana de Rueda

   Sin duda,  después de dos días de playa, tengo que reconocer que  disfruto mucho más en el río, pero como uno no vive solo, tiene que acomodarse a lo que toca y durante unos días toca playa, que también es necesaria para ayudar a pasar los crudos inviernos leoneses, aunque ya no son tan crudos y sí largos.

Playa de Denia
   El domingo 17 era la primera vez que iba al coto de Quintana de Rueda  durante esta temporada, pues, el año pasado, me fue mal cuando cogí como sobrante el de Gradefes en la segunda quincena de Mayo.  Este es un coto que se caracteriza por grandes tabladas donde, cuando las truchas comen en superficie, da gusto  ver la proliferación de ondas que preparan incitando al pescador que, nervioso, no sabe a cual “atacar primero” y los nervios a los pescadores sólo nos traen dolores de cabeza, lo  digo porque suelen llevar aparejado el enredo de los aparejos. A  cuantos no nos ha pasado que, durante toda una mañana, no hemos enganchado la cuerda ni una vez en los salgueros y es empezar a moverse las truchas cuando ocurre la fatalidad, en fin, cosas del río y que deben quedar en el río.

Tablada del coto de Quintana de Rueda

   Pues mi amigo y yo empezamos a pescarlo sobre las 12,00 horas en una corriente que da  inicio a una gran tablada y, creo recordar  que, en la primera tirada, enseguida enganchó una; pescaba con mosquitos de los que yo hago, por lo que  tengo que agradecerle que confíe en mí; todos sabemos que el mosquito que más pesca es aquel en el que confiamos plenamente y por ello siempre lo llevamos puesto ( claro,  siempre que sea el adecuado al momento), en cualquier caso, su cuerda y la mía se diferenciaba en que la suya tenía cinco mosquitos por encima de la boya más el rastro y la mía ocho incluido el rastro.

Me gustan las equilibristas luchadoras, espero pescarla el proximo día 
   Quien ha pescado el Esla un día como el que tuvimos nosotros cualquier otro río le parecerá insignificante, y es que, a ambos, se nos repitieron muchas veces las enganchadas dobles, sobre todo entre las 13 y las 14 horas,  claro que, casi siempre, sólo llegaba a tu poder una que solía ser la pequeña. Durante esta jornada creo que se me han escapado muchas más de la media de otros días y, sin duda, no ha sido la cuestión: arponcillo sí, arponcillo no, aunque también, si no, visto desde la distancia, debido al hecho del poco cuidado que le puse en la recuperación una vez presa, pues era tal la actividad que era predecible que en la siguiente tirada otra se clavase. 
Con la hormiga.

   Comimos el bocadillo a las 18,00 horas, aprovechando el momento del cambio de una tablada a otra en el que tuvimos que coger el coche, pero es que no pararon su actividad en superficie en todo el día;  ¡coño!, que no se hace bien la digestión sabiendo que las truchas se siguen moviendo. A las 21,30 horas abandonamos el río, pues yo, al día siguiente, tenía que regar la huerta antes de venirme a Denia; nos tomamos unas cervezas, comentamos la jornada, arreglamos España,  en fin lo que se espera de una buena jornada de pesca. Todos los mosquitos rindieron, aunque creo que si hay que destacar uno en especial, diría que la hormiga. Durante un buen rato, a partir de las 17,00 horas, llegué a tener dos en la cuerda y también tuve dos carnes a partir de las 19,00 horas. Habrá que repetir; doy por bien empleados los 12, 35 euros que cuesta el coto como sobrante.



jueves, 14 de junio de 2012

Caí en la tentación

  
    Había comentado que hasta el miércoles no podía ir de pesca pero decía Oscar Wilde “que la mejor manera de librarse de una tentación es caer en ella” y eso hice yo el domingo, sabía que jugaba Nadal, la selección española de futbol y que con Fernando Alonso teníamos  por delante una emocionante carrera, pero me levanté pensando en el río y al final me convencí de que podía pasar unas horas en él y ver también los acontecimientos deportivos.
Estado de la superficie del agua
   Pues eso que a las 11,00 horas ya estaba yo vareando el río Esla, confiando en que mi ninfa favorita me sorprendiese en alguna corriente o debajo de algún salguero y lo que verdaderamente me sorprendió fue el viento, tanto,  que decidí comerme el bocadillo a las 13,00 horas, a ver si,  mientras,  amainaba el aire y el  río limpiaba un poco las pelusas de los chopos y salgueros que habían caído. Día malo, donde los haya, para practicar la pesca, con casi nula actividad de las truchas en superficie, que sólo me habían permitido coger, hasta esa hora, un par de ellas pequeñas a la ninfa. 


Una de las mejores tiradas arruinada por la caída del chopo
    A la 13,30 horas reinicie  la faena y,  si bien el viento seguía en rachas parecidas, al río ya no caía tanta pelusa  por lo que empecé a tomar alguna trucha pequeña a la hormiga y al salmón. Finalmente, a las 15,30 horas, decidí que debía caer en la nueva tentación, que no era otra que volver a León y ver los acontecimientos deportivos de la tarde, con un pobre saldo de dos truchas reglamentarias, cogidas ambas con la hormiga.


La hormiga pudo con ellas



   La jornada del miércoles fue distinta, la comencé a las 12,30 horas y a la segunda tirada cogí una  23 cm con mi ninfa. El río estaba en buenas condiciones para pescarlo y en el mismo lugar del aparcamiento coincidí con el pescador que, el viernes pasado, me informó del porqué había tanta trucha pequeña, no obstante,  más tarde,  en charla con  otro pescador en un  lugar donde el río se estrecha para formar luego un gran pozo, allí con la caña de cinco metros y su aparejo de ninfas, entre las que pude ver algún perdigón, trataba de arrancarle al río alguna trucha grande posicionada en el fondo, éste me comentó, respecto a las truchas pequeñas, que era lógico que hubiese  pues habían desmantelado la piscifactoría de Vegas del Condado y todas las truchas las habían repartido por los ríos leoneses, ya que no tenía sentido mantener esta piscifactoría cuando se iba a imponer la pesca sin muerte a partir del próximo año. 

Otra trapecista
   Sobre las 15,00 horas se volvieron locas y, durante aproximadamente media hora,  rara era la tirada en la que no había enganchada, varias veces hasta dos, pero en ningún caso llegué a tener que desanzuelar las  dos pues, al cobrarlas, por una u otra razón una de ellas se escapaba. 


Mi saltona campeona
   Los mosquitos campeones en ese momento fueron por el mismo orden, la saltona amarilla,  el rosa avellanado, la hormiga y el carne (paleta 3277). Hasta las 17,30 horas que abandoné el río no pararon de comer en superficie, claro que no con la misma intensidad que esa media hora, pero se hizo divertida la jornada,  de tal forma que no tuve tiempo de comerme el bocadillo y me tuve que conformar con una barra de cereales y una naranja que,  además  del botellín de agua,  llevo en mi bolsa de pesca,  porque ya me conozco. 
Cupo reglamentario
    El domingo, con un amigo, he cogido el coto de Quintana de Rueda y esta será mi cuerda de inicio, claro que, cuando abandone el río no se parecerá pues suelo cambiar mucho los mosquitos. Por supuesto, para ajustarse a la normativa, van sin arponcillo. En el Eria suelo utilizar sólo tres o cuatro mosquitos y una caña muy corta, aquí utilizo una de cuatro metros y con siete u ocho señuelos, todo es cuestión de práctica y de ir aumentando poco a poco los mosquitos y la longitud de la caña.


Mi cuerda para el coto de Quintana







lunes, 11 de junio de 2012

Receta de truchas


  Hoy es lunes, no hay río y tampoco he ido al pueblo a “enredar” en el huerto, así que voy a mostrar mí receta para hacer las truchas y nada mejor que con imágenes. 

Cortes por cada lado


   Como norma le doy tres cortes por cada lado, procurando  que  no estén a la misma altura, así evitamos que se rompa al manipularla, luego la salo, siendo generoso con el fin de reforzar su sabor.

Truchas del Esla listas para freír

   La fritura debe ser lenta y, una vez que se echa a la sartén y se tapa, no se deben mover hasta el momento de darle la vuelta,  así evitaremos que pierda la piel. Aceite sólo el necesario para cubrir el fondo.


Ahora por el otro lado
Se reserva el aceite

   Una vez fritas, a mí me gustan con la piel un poco “churruscadita”, se sacan, se separa la sartén del fuego y se le añade una cucharadita de pimentón picante ( la cantidad según gustos) moviendo y aprovechando bien los restos de la fritura con una cuchara de palo (nunca la sartén sobre el fuego pues se quemaría el pimentón y amargaría). Luego con esta salsa cubrimos las truchas y cada uno buscará el vino que más le guste. 


Condimento preparado



Están ricas, ricas
Pimentón de la Vera, que yo utilizo 






HORMIGA






   Este es otro mosquito  que debemos tener presente desde ahora y durante todo el verano.  Ha habido jornadas durante el mes de junio que he puesto dos. Hay unos determinados días, normalmente en la segunda quincena de junio, que es fácil detectar su presencia por los parques de la ciudad, ese es el momento de colocar varios. En realidad  las hormigas son alados cuando abandonan el hormiguero para formar unos nuevos, normalmente suelen ser días sin viento. Estas tras el vuelo nupcial, que suele ser breve, caen a tierra o al agua y ahí es donde el pescador saca ventaja a las truchas. A la hora de montar este mosquito, con el fin de darle un mayor realismo, debemos resaltar la división entre el tórax y el abdomen. Yo utilizo gütermann 000, brincándolo en negro y la pluma un indio acerado medio. A mí donde más me rinde es de ahogado o semiahogado.


ROSA AVELLANADO



   Este mosquito, también conocido como "Caramelo", nunca me decepciona en el mes de junio, incluso en los días malo siempre te da alguna trucha, yo lo monto con el 3202 de Siltek (antigua paleta) brincándolo en avellana y con pluma pardo flor de escoba. Lo coloco de semiahogado o semibailarín.





sábado, 9 de junio de 2012

Huerta y río buena combinación



   El jueves me lo pasé en el pueblo  dedicando el tiempo a poner a punto  el huerto; parece que este año siempre ando algo retrasado. Tuve que volver a afilar los palos de los tomates,  pues la parte que se introduce en la tierra ya estaba podrida,  así evito que cuando las plantas estén cargadas de tomates estos se rompan y caigan los tomates al suelo. Una vez que hice los surcos clavé un palo al lado de cada una de las plantas  y regué todo el huerto y ahí dejo una imagen del resultado. Poco a poco empieza a coger color y volumen.


Esto promete


   Con lo que está cayendo en España bueno es recordar la fabula de Esopo en la que utilizando la pesca  nos daba  una lección muy instructiva que creo que debemos tener presente en estos días tan convulsos :

Pescaba un pescador en un río, atravesándolo con su red de una a otra orilla ; luego, con una piedra atada al extremo de una cuerda de lino, agitaba el agua para que los peces, aturdidos, cayeran al huir  entre las mallas de la red. Viole proceder así un vecino y le reprochó el revolver el río, obligándoles a beber el agua turbia; más él respondió . ¡ Si no revuelvo el río, tendré que morirme de hambre!- Igual sucede con las naciones: entre más discordia siembren los agitadores entre la gente, mayor será el provecho que obtendrán. Forma siempre tu propia opinión y no vayas a donde te quieran empujar otros sin que lo hayas razonado.



Lugar donde la ninfa es inigualable



   Bueno, volvamos al río Esla donde ayer pasé una bonita jornada de pesca. He sustituido el falangista por la saltona amarilla, pues el martes,  5 de junio, no me dio ninguna trucha y ayer llevaba media jornada y ni tocarlas con este mosquito, el cambio fue acertado.

lugar idóneo para la ninfa

   Saqué unas fotografías  a varios sitios donde siempre o casi siempre engancho alguna con la ninfa, la acción de pesca consiste en lanzar la cuerda en la parte arriba del Salguero, pegando la boya a este  y dejando que  la corriente introduzca el rastro con la ninfa por debajo del matorral, es mortal de necesitad.

Siempre tenso el sedal



 Al principio de la temporada, con la nueva normativa, pensé que al tener que quitar el arponcillo a mis anzuelos perdería muchas truchas, sin embargo no es así y lo único que hace falta es un poco más  de cuidado para mantener tensa la línea. No obstante sigue siendo necesaria una tenacilla para “desanzuelar” algunas que se los tragan  hasta la “garganta”, debiendo  hacer un primer movimiento hacia adentro para desclavar y sale sin causar ningún tipo de lesión. Yo la tenacilla que utilizo es la que tengo para aplastar el arponcillo.




Muy útiles en el río




Las reglamentarias

   A las 15,00 horas volví al coche ya que mi cuerpo me solicitaba descanso y aprovisionamiento, algún día escribiré algo sobre el sitio donde hay que dejar el coche, allí otro pescador que tenía las misma carencias que las mías daba buena cuenta de sus viandas. Al comentarle, yo,  que la Consejería de  Medio Ambiente, a través del órgano  responsable, debían haber repoblado  ese tramos del río porque salía mucha trucha entre 19 y 20cm, me comentó que, hace unos días, coincidió pescando con un ribereño que le dijo que en el mes de marzo habían repoblado en el coto de Gradefe  y que, unos días después, la Confederación había abierto el pantano a lo “bestia” y pensaba que esas truchas eran las que habían soltado en el coto. Bueno, ellas han decidido que se está mejor fuera del coto y yo también. A las 17,30 horas, abandone, con mis cuatro truchas reglamentarias, la placida ribera del Esla y ya tengo morriña, pero también hay otra vida además de la del río, ¿ o no? . Hasta el miércoles estoy pillado con  deberes.


La primavera sigue en el Esla







lunes, 4 de junio de 2012

SALMON FUERTE


Salmón fuerte 

   Estamos en Junio y en nuestra cuerda no puede faltar un salmón fuerte, va muy bien de semiahogado, ayer en el Esla, a primera hora, las enganchadas se alternaban entre este mosquito, el carne ( paleta 3277) y el falangista,.
   Yo  monto el cuerpo con rayón Madeira col. 1020, brincado en amarillo huevo y pluma indio  plateado. He probado muchas clases de anzuelos, más grandes, más pequeños y al final, desde hace muchos años monto todo en el número 12 de Mustad, es, sin ningún genero de dudas, el que me permite tomar más truchas, no se la razón pero se escapan muchas menos  que con el número 13, por lo menos a mí. Quizás es porque mis moscas ahogadas tienen más volumen de cuerpo que las comerciales. 


Bien está lo que bien acaba



   Cuando oigo el sonido de una maquina excavadora  un domingo cerca del río me pongo a temblar, y es  que son los días señalados para efectuar las chapuzas que durante la semana no tienen tiempo de realizar; ya saben, es aquello de  mira a ver, hombre,  si tienes un rato y arreglas ese cauce . Pues eso,  que a los diez minutos de oírlo el Esla presentaba el aspecto de  un gran barrizal, eran las 11,45 horas de la mañana, así que recogí mis bártulos, tomé el coche y hasta Cubillas de Rueda, donde aparqué, como siempre, debajo de un gran chopo centenario  que, en su día,  me enseñó mi amigo de Villomar. 

Chopo centenario

   Me asomé al río comprobando que llevaba la mitad de caudal del que lleva en la zona donde yo pesco, no vi a ningún pescador y algunas truchas estaban comiendo en superficie, la primera pequeña me entro al falangista, que como ya he mencionado lo llevo de bailarín. Desde las 12,30 hasta las 14,00 horas que decidí volver a mi zona de pesca, pues supuse que la máquina habría finalizado la obra, pesque unas diez o doce truchas de entre 10 y 20 cm, entrando sobre todo  al falangista y carne (3277 de la paleta).

Obra que alteró las aguas del Esla
No se les ocurrió cortar el agua durante las obras

   Efectivamente la máquina había terminado su obra, un poco chapucera según se aprecia en la fotografía, y había conseguido enviar a casa a todos los pescadores, por lo que me encontré en una gran tablada yo sólo. He puesto este título porque ha sido uno de los días grandes de pesca, donde, hasta en tres ocasiones, trabe dos truchas en una misma tirada; yo lo achaco al hecho de que al haber embarrado el río  no hubo eclosión o si la hubo la trucha no comió, lo cierto es que entraban con fuerza y no importaba que revolcases una que, en la misma zona, a la siguiente tirada   repetía otra y así hasta las 16,30 horas. Desde esta hora hasta las 18,30 horas en que di por finalizada mi jornada de pesca siguieron entrando pero en intervalos ya más largos. Los dos mosquitos campeones fueron el carne y el salmón fuerte y a partir de las 16,30 horas, el rosa brincado en avellana y también el brincado en amarillo huevo. En fin, adrenalina a tope. Por tanto creo que le viene bien el título de esta comedia de Shakespeare.


Dos de una tirada



viernes, 1 de junio de 2012

Temporada de verano



Los chopos soltando grandes copos de pelusa

   Hoy es el segundo día que la sarnosa hembra no me ha dado ninguna trucha;  el 29 de Mayo fue el primer día, y en aquella ocasión en mi aparejo había dos; ha llegado el momento del cambio. Fue una jornada buena, aunque sólo pesqué una de más de 21 cm, pues hubo momentos que entraban como locas al rosa chicle y al carne (paleta 3277). No obstante el  inconveniente lo creó la pelusa de los chopos y álamos que me obligaba, cada cierto tiempo, a repasar los mosquitos y limpiarlos. No es la primera vez que un pescador me habla de los inconvenientes de pescar con tanto polen; yo soy poco partidario de corregir,  pues cada uno de nosotros somos nosotros mismos y nuestras circunstancias, pero sí es bueno recordar que no es polen, que se trata de las semillas del chopo que recubiertas con estos pelillos blanco se dispersan lejos de sus progenitores y que pueden ser molestas, pero no son causantes de alergias.
  También he retirado el oro viejo y lo he sustituido por un falangista, sí, sí, de bailarín, y es que en esta época suele dar un rendimiento envidiable en esta posición en el Esla.

Falangista en posición de bailarín
    Hoy, después de los cambios, en mi cuerda hay por encima de la boya un carne de la paleta 3277 de ahogado, le sigue  un rosa chicle, un rosa brincado en avellana, un salmón y de bailarín el falangista. De rastro siempre pongo la ninfa faisán, aunque en ocasiones la retiro cuando pesco tabladas de aguas lentas, cuyas orillas están protegidas por arbustos, con el fin de acercar todo lo posible el señuelo a estos, hoy he querido acercarlo tanto que he perdido un par de boyas y tres o cuatro mosquitos.  El río ha aumentado algo su caudal respecto a la anterior jornada del día 29, lo que hace que la trucha mayor comience a moverse más y esto me ha permitido pescar las cuatro reglamentarias. Sin ninguna duda el mejor mosquito ha sido el rosa chicle y en un escalón inferior pondremos el carne, falangista y ninfa faisán. Tengo que suspender al rosa brincado en avellana que sólo me dio una y cero la mosca ahogada color salmón. 

Gran contorsionista


EL FALANGISTA



Mosca ahogada Falangista

   Hoy traigo este mosquito porque una vez que el oro viejo pierde efectividad yo lo sustituyo por el falangista. Sí es cierto que lo normal es que sea el sustituto del sangre de toro como rastro, pero a mi en esta fecha de primeros de junio donde más rendimiento le encuentro es de bailarín, me funciona mejor que las saltonas, claro que yo únicamente pesco en estas fechas en el Esla. Lo monto con el culo rojo utilizando guterman 156 y el resto del cuerpo negro con guterman 000, brincando ambos colores con negro y la pluma pardo muy oscuro.